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EL VERDADERO DIABLO Una Exploración Bíblica

Libro completo en formato PDF

 

correo electrónico del autor, Duncan Heaster

 

Contenido
Prólogo (porTed Russell)
Introducción
Capítulo 1 - La Historia de una Idea
1-1 Una Historia del Diablo y Satanás en Tiempos del Antiguo Testamento
Digresión 1 - Deconstrucción
1-1-1 Israel en el Exilio: La Influencia Babilonia / Persa
1-1-2 La Influencia Griega
1-2    El Diablo en el Nuevo Testamento
1-2-1 Satanás en el Pensamiento de Justino Mártir
1-2-2 Satanás en el Pensamiento de Ireneo y Tertuliano
1-2-3 Satanás en el Pensamiento de Clemente y Orígenes
1-2-4 Satanás en el Pensamiento de Lactancio y Atanasio
1-2-5 Satanás en el Pensamiento de Agustín
1-3    Satanás en la Edad Media
1-4    Satanás Desde la Reforma en Adelante
1-4-1 Satanás en el Paraíso Perdido
1-5    Los Objetores
1-6    El Diablo y Satanás en el Pensamiento Reciente

Capítulo 2 - Algunas Enseñanzas Básicas de la Biblia
2-1 Ángeles
Digresión 2 - Judas y el Libro de Enoc
2-2 El Origen del Pecado y del Mal
Digresión 3 Romanos y la Sabiduría de Salomón
Digresión 4 La Intención y Contexto de Génesis
2-3 Satanás y el Diablo
2-4 El Satanás Judaico
2-5 El Infierno
Digresión 5 Cristo y los "Espíritus Encarcelados"

Capítulo 3 - Algunas Implicaciones Prácticas

3-1 Algunas Implicaciones Prácticas
3-1-1 "Ser de mente espiritual"
3-2 Las Preguntas Difíciles

Capítulo 4 - Demonios
4-1 El Diablo, Satanás y los Demonios
4-2 Los demonios y los Ídolos
4-2-1 La Teología Cananea Hecha añicos
4-2-2 Caso de Estudio: Resef
4-2-3 Caso de Estudio: Los Dioses de Egipto
Digresión 6 - "También los demonios creen y tiemblan" (Santiago 2:19)
4-3 Los Demonios y las Enfermedades
4-3-1 Legión y los Gadarenos
4-3-2 Exorcismo de Demonios
4-4 El Lenguaje de la Época
4-5 Dios Adopta una Perspectiva Humana
Digresión 7 - El Estilo de Enseñanza de Jesús
4-6 ¿Por qué Jesús no Corrigió a la Gente?
4-7 La Psicología de la Creencia en Demonios

Capítulo 5 - Un Examen de los Pasajes Específicos de la Biblia que Mencionan al Diablo y a Satanás
5-1 Prólogo: Pasajes de la Biblia Malentendidos
5-2 La Serpiente en Edén - Génesis 3:4-5
5-3 Los Hijos de Dios y las Hijas de los Hombres - Génesis 6:2-4
5-4 El Satanás de Job - Job 1:6
5-4-1 El Satanás de Job: ¿Un Correligionario?

5-4-2 El Satanás de Job: ¿Un Ángel Satánico?
5-4-3 Deconstrucción  del Mito Satánico en Job
5-5    Lucifer, Rey de Babilonia - Isaías 14:12-14
5-6    El Querubín Grande - Ezequiel 28:13-15
5-7    Zacarías 3
5-8   La Tentación de Jesús - Mateo 4:1-11

5-8-1 Jesús en el Desierto: Un Estudio del Lenguaje y de la Naturaleza de la Tentación
5-8-2 Las Tentaciones en el Desierto: Una Ventana a la Mente de Jesús
5-9    Los Espíritus Inmundos - Mateo 12:43-45
5-10  El Diablo y sus Ángeles - Mateo 25:41
5-11  El Diablo Quita la Palabra - Marcos 4:15
5-12  Satanás Como un Rayo - Lucas 10:18
5-13  Satanás Entró en Judas - Lucas 22:3
5-14  Pedro y Satanás - Lucas 22:31
5-15  Vuestro Padre el Diablo - Juan 8:44
5-16  Oprimidos por el Diablo - Hechos 13:10
5-17  Hijo del Diablo - Hechos 13:10
5-18  El Poder de Satanás - Hechos 26:18
5-19  Entregado a Satanás - 1 Corintios 5:5
5-20  El Dios de Este Mundo - 2 Corintios 4:4
"El Príncipe de Este Mundo" - (Juan 12:31; 14:30; 16:11)

5-21  Un Ángel de Luz - 2 Corintios 11:13-15
5-22  El Mensajero de Satanás - 2 Corintios 12:7
5-23  El Príncipe del Aire - Efesios 2:1-3
5-24  Dando Lugar al Diablo - Efesios 4:26-27
5-25  Las Asechanzas del Diablo - Efesios 6:11
5-26  El Lazo del Diablo - 1 Timoteo 3:6-7; 2 Timoteo 2:26
5-27  Se han Apartado en pos de Satanás - 1 Timoteo 5:14-15
5-28  Resistid al Diablo - Santiago 4:7; 1 Pedro 5:8
5-29  Prisiones de Oscuridad - 2 Pedro 2:4; Judas 6
5-30  El Cuerpo de Moisés - Judas 9
5-31  La Sinagoga de Satanás - Apocalipsis 2:9-10, 13, 24
5-32  Miguel y el Gran Dragón - Apocalipsis 12:7-9
5-33 El Diablo y Satanás Atados - Apocalipsis 20:2, 7, 10
Digresión 8: "El Hombre de Pecado"
La Bestia y el Hombre de Pecado
El Anticristo en Daniel

Capítulo 6 - Algunas Conclusiones
6-1  Algunas Conclusiones
Digresión 9 - El Sufrimiento (Bev Russell)

 

1-1-1 Israel en el exilio: La influencia Babilónica / persa
De influencia especialmente significativa en el judaísmo eran las ideas del zoroastrismo. Esta era una filosofía que empezó en Persia alrededor del año 600 a.C., y su popularidad estaba creciendo cuando Judá fue en cautividad a Babilonia / Persia. Esta filosofía postulaba que había un dios bueno de la luz (Mazda) y un dios malo de las tinieblas (Ahriman). El bien conocido pasaje de Isaías en Isaías 45:5-7 es una clara advertencia a los judíos en cautividad a no aceptar esto; únicamente el Dios de Israel hizo la luz y la oscuridad, el bien y el "mal". Pero Isaías está en realidad lleno de otras alusiones a las ideas zoroastristas, intentando enseñar a Judá la verdadera posición sobre estas cosas. De este modo, s enseñaba que "los Salvadores vendrán de la simiente de Zoroastro y, por último, el gran Salvador", el cual habría de nacer de una virgen, resucitar a los muertos y dar inmortalidad (1). Estas ideas están recogidas en Isaías 9:6  y aplicadas proféticamente al máximo Salvador, Jesús; como para advertir a los judíos a que no aceptaran las prevalecientes ideas persas en esta área. En verdad, parecería que [bajo inspiración divina] gran parte de la Biblia hebrea fue re-escrita en Babilonia a fin de desarticular las ideas con las cuales se encontró Israel en Babilonia (2).  De ahí que encontremos frases de la era persa en libros como Job que, en un nivel, eran claramente escritos hebreos muy antiguos, y, sin embargo, habían sido revisadas por alguna mano de la era persa. Los judíos también estaban influenciados por la idea del zoroastrismo de que de algún modo Dios mismo nunca causaría el mal en nuestra vida; y, por lo tanto, Dios se ha de ver como de algún modo distanciado de todas acciones buenas o malas, ya que éstas están bajo el control de los dioses buenos y malos. Sofonías 1:12 advierte en contra de este punto de vista persa: "Yo escudriñaré a Jerusalén con linterna, y castigaré a los hombres que reposan tranquilos como el vino asentado, los cuales dicen en su corazón: Jehová ni hará bien ni hará mal". Lo cierto es que Dios personalmente está vehementemente comprometido con este mundo y con nuestra vida; y así él es quien produce la oscuridad y la luz, el bien y el mal.

Ahrimán, el Señor de la Oscuridad, se halla representado en relieves persas con alas, y de ahí que a Satanás se le llegase a describir con alas, aún cuando la Biblia no dice absolutamente nada de esto. Según el zoroastrismo, Ahrimán envidiaba a Júpiter / Ormuz, y trató de asaltar el cielo. Los judíos ansiosamente adaptaron esta mitología a su mito acerca de una rebelión en el cielo, y después fue recogida por escritores como Milton y la convirtieron en doctrina cristiana estándar; aun cuando la Biblia hebrea no dice absolutamente nada de esto. Un cuidadoso estudiante, que durante toda su vida ha estudiado la historia de la idea acerca del Diablo, ha comentado: "En la religión hebrea pre-exilio, Yahvéh hizo todo lo que estaba en el cielo y en la tierra, y tanto el bien como el mal. El Diablo no existía" (3).

Especialmente durante su cautividad en Babilonia los judíos cambiaron hacia el entendimiento de que verdaderamente había una entidad separada responsable de los desastres. "Gran parte del judaísmo adoptó un enfoque dualista del mundo, lo que los llevó a considerar los problemas humanos... como el resultado de maquinaciones de poderes sobrehumanos opuestos a la voluntad divina. Este punto de vista se infiltró en el modo de pensar de los judíos durante el tiempo del exilio de Israel en Babilonia" (4). "La idea de que los demonios eran responsables de todo mal moral y físico, penetró profundamente en el pensamiento religioso judío en el período siguiente al exilio babilónico, sin duda como resultado de la influencia iraní en el judaísmo" (5). De ahí que Isaías 45:5-8 les advierta que no deben adoptar las ideas babilónicas en esta área, sino que permanezcan firmes en su fe de que Dios, su Dios, el Dios de Israel, el único Yahvéh, era la fuente suprema de todas las cosas, tanto positivas como negativas, que no tiene igual ni competidor en el cielo. Esto se vuelve un tema frecuente en segundo Isaías y en otros profetas que escribieron en el contexto de Israel en cautividad. Pero aunque Judá se hallaba en cautividad, los judíos empezaron a especular sobre los orígenes de los ángeles que trajeron calamidad, y bajo la influencia persa se desarrolló la idea de que los ángeles eran independientes de Dios. Los judíos fueron más allá y concluyeron que "el aspecto destructivo de la personalidad de Dios se separó del bien y se conoce como el Diablo", llegando a desarrollar las leyendas judías acerca de un Satanás personal [o Sammael] con 12 alas, que tiene aspecto de un macho cabrío y que es responsable de toda enfermedad y muerte (6).  Por supuesto, los judíos eran monoteístas, y estas ideas se desarrollaron a fin de que pudieran creer tanto en un solo Dios, y también en la idea de los persas acerca del dios dualista del bien y del mal. Fue en este período que los judíos se apegaron a la idea de los ángeles pecadores, aun cuando el Antiguo Testamento no dice nada acerca de ellos. Ellos no querían transigir su monoteísmo diciendo que había más de un Dios, así que instituyeron un "dios del mal" como un ángel pecador muy poderoso. Y esta errónea enseñanza fue recogida por los primeros cristianos que también estaban ansiosos por acomodarse a las ideas paganas acerca del mal que había a su alrededor.

El Antiguo Testamento, y en realidad junto con el Nuevo Testamento, personifica al mal y al pecado. Sin embargo, Edersheim establece razones para creer que a medida que el judaísmo rabínico se desarrollaba durante el exilio en Babilonia, esta personificación del mal se propagó en los escritos judaicos a tal punto que se empezó a hablar del pecado y el mal como si fueran seres independientes. Y, por supuesto, podemos entender por qué sucedió esto: a fin de reducir la distancia entre el judaísmo y las creencias babilónicas acerca de tales seres que había a su alrededor. Edersheim muestra cómo el entendimiento bíblico de la yetzer ha 'ra, la inclinación hacia el pecado que hay dentro del género humano, se llegó a entender como un ser personal maligno llamado "el tentador" (7).

Es necesario que se entienda que los persas no fueron los primeros en adoptar un punto de vista dualístico del cosmos; es decir, que hay un Dios del bien que da bendiciones y cosas positivas, y un dios del mal que trae desastres. Los egipcios tenían a Osiris como el dios del bien. Los nativos del Perú tenían a Carnac como el dios del bien y a Supay como el dios del mal; los antiguos pueblos escandinavos tenían a Loki como el dios del mal y a Thor como el dios del bien; los esquimales tenían a Ukouna el bueno y a Ouikan el maligno (8). La epopeya sumeria acerca de Gilgamés tenía la misma idea: Gilgamés y Huwawa se hallaban en oposición entre sí. Esta forma de pensar es totalmente humana; se basa en la suposición de que nuestro punto de vista sobre el bien y el mal es definitivamente correcto. Es necesario que a  la posición bíblica de que la humanidad está normalmente equivocada en sus juicios acerca de asuntos morales, y que los pensamientos de Dios están muy por sobre los nuestros (Isaías 55), se le dé la debida importancia. Porque con frecuencia terminamos por darnos cuenta de que lo que nosotros percibimos como "malo" en realidad se vuelve en nuestro mayor bien; José pudo comentar lo siguiente a sus hermanos: "Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien [...] para mantener en vida a mucho pueblo" (Génesis 50:20).

El dualismo, en la forma en que influyó en el judaísmo y después en el cristianismo apóstata, está en realidad proponiendo dos dioses. No obstante, la Biblia es enfática, desde la primera hasta la última página, en que hay un solo Dios, el Padre, el Dios revelado en la Biblia. Esto no deja cabida para un segundo dios o un dios del mal. Aquí llegamos directamente al punto de por qué este asunto es importante para cualquier persona que crea en la Biblia. Helene Celmina era una letona irreligiosa que se hallaba prisionera en el gulag  soviético. Después ella escribió acerca de sus compañeros de prisión, los cuales eran Testigos de Jehová; y puedo identificarme con sus reflexiones palabra por palabra en lo siguiente: "Recuerdo, también, otra conversación que tuve con los Testigos de Jehová respecto a los dioses. Ellos insistían en que había dos dioses: Jehová y otro [Satanás] al cual combatía Jehová. A pesar de lo mucho que lo intentaron, usando la ciencia moderna, la química y los más recientes hallazgos en física, no pudieron probarme la existencia del otro dios" (9). Estas son las palabras de una mujer que estaba encarcelada en uno de los más abusivos y perversos sistemas de la historia; pero tal situación no le hizo creer en la existencia de "segundo dios", sino más bien la impulsó a creer con más firmeza que el solo Dios verdadero es el único Dios. Solzhenitsyn, como señalaremos más adelante, aprendió la exactamente la misma lección en el mismo gulag.

Profetas y Monstruos

Una y otra vez los profetas del Antiguo Testamento se refieren a los mitos acerca del monstruo del caos; y los aplican a Egipto o a otros enemigos terrenales del pueblo de Dios. De este modo, la destrucción del ejército egipcio en el mar Rojo se describe en cuanto a que Rahab el dragón es despedazado y perforado, con sus cabezas destrozadas en las aguas, así como las cabezas de Leviatán igualmente aplastadas (Salmos 74:13, 14 NRSV; otras referencias se hallan en Ezequiel 29:3; 5; 32:2-8; Salmos 87:4; Isaías 30:7; Jeremías 46:7, 8). Esto es bastante enfático, y el punto es que el verdadero enemigo del pueblo de Dios  no es el monstruo del caos, sino más bien gente y sistemas humanos, terrenales. Y debería haber gran gozo por el hecho de que Dios los vence una y otra vez. De este modo, con mucha frecuencia a Israel se le recordaba la victoria histórica sobre Egipto por medio de las plagas y el éxodo; porque esto era en lo que debían meditar, más bien que en mitos acerca de monstruos del caos que participaban en batallas cósmicas. Y todo esto se aplica a nosotros; es la victoria de Dios sobre nuestros oponentes reales y visibles, lo cual es causa para que nos regocijemos, así como que nos haya creado para ser su pueblo, lo cual es la realidad última que debiera absorber nuestra vida, más bien que leyendas acerca de conflictos cósmicos.  En lo que a nosotros respecta, Egipto se halla aún a  nuestro alrededor, como lo señaló Martín Luther King: "Egipto simbolizó el mal en la forma de una opresión humillante, una explotación impía y una dominación aplastante" (10). Estas realidades terrenales son el verdadero Satanás / Adversario con las cuales nos enfrentamos diariamente, más bien que con monstruo cósmico. Y la historia gloriosa completa de las acciones de Dios contra Egipto es nuestra inspiración y estímulo. La idea popular contemporánea acerca de un dragón cósmico que es hollado y arrojado al mar se recoge en Miqueas 7:19 y se reaplica al pecado: "Sepultará ["pisoteará" - R. V.] nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados". Una vez más, está apartando nuestra atención de los mitos de dragones cósmicos, y re-enfocándola hacia nuestros pecados como el verdadero Satanás / Adversario.

Re-enfoque en las Realidades de la Tierra

Este re-enfoque de las leyendas acerca de conflictos cósmicos hacia seres e imperios reales, concretos y humanos de la tierra se ha de hallar en todo el Antiguo Testamento. Las leyendas paganas se aluden únicamente a fin de deconstruirlas y re-enfocar la atención de Israel hacia los conflictos esenciales, en contra de nuestros propios pecados humanos y en contra de la oposición espiritual al mundo incrédulo que nos rodea. Habacuc 3:8 pregunta: "¿Te airaste, oh Jehová, contra los ríos? ¿Contra los ríos te airaste? ¿Fue tu ira contra el mar?". Recuerde que el mar y los ríos eran considerados como la morada de diversos dioses, e incluso a veces se les identificaba directamente con ellos. Habacuc 3:12 procede a contestar la pregunta; que no, que la ira de Jehová no era contra esos dioses del mar / ríos, sino que: "Con ira hollaste la tierra, con furor trillaste las naciones". El verdadero conflicto de Yahvéh era con los enemigos de Israel, no con los dioses paganos. Porque él era el solo y único Dios.

Considere los siguientes ejemplos de lo que yo llamo "re-enfoque".

-- Uno de los documentos de Ras Shamra consigna el poema cananeo acerca de las guerras de Baal en contra del Príncipe del Mar: He aquí, tus enemigos, oh Baal, he aquí, tú castigaste a tus enemigos, he aquí tú aniquilaste a tus enemigos" (11). Esto se vierte efectivamente al hebreo en Salmos 92:10 y se aplica al conflicto de Yahvéh con los enemigos de Israel y a todos los pecadores: "Porque he aquí tus enemigos, oh Jehová, porque he aquí, perecerán tus enemigos; serán esparcidos todos los que hacen maldad". Los mitos acerca del supuesto inframundo de los dioses del Mar se reaplicó a hombres perversos y naciones inicuas; la verdadera fuente del mal en el mundo de Israel.

-- Jeremías 9:21 habla de cómo "la muerte [Mawet - una referencia a Mot, el dios pagano del submundo] ha subido por nuestras ventanas, ha entrado en nuestros palacios". La alusión es a cómo se le imagina a Mot, el supuesto dios de la muerte y del submundo, entrando en la casa de la gente por las ventanas para darles muerte. De este modo, los textos de Ras Shamra consignan cómo en su conflicto cósmico con Mot, Baal se hizo construir un palacio sin ventanas a fin de que Mot no pudiera entrar y darle muerte (12).
Pero la referencia histórica  de Jeremías 9:21 apunta claramente a la invasión de Judá. De este modo, la bien conocida idea del conflicto cósmico entre Baal y Mot se re-enfoca en los ejércitos babilónicos a quienes el único Dios verdadero ha enviado en contra del descarriado pueblo de Judá.

-- Los textos de Ras Shamra incluyen una sección sobre la caída y muerte de Baal. Aunque escrita en ugarítico, esta sección tiene asombrosas similitudes con el poema de Isaías 14 acerca de la caída de Babilonia, por ej.: "La muerte de Baal" incluye líneas tales como "Desde el trono en el cual se sienta... cómo ha caído Baal, cómo ha sido abatido el poderoso". Por lo tanto, el mensaje de Isaías era: "Olviden esas historias acerca de que Baal fue abatido, lo que es relevante para nosotros es que la poderosa Babilonia, que nos tienta para que confiemos en ella en vez de Yahvéh Dios de Israel, ha de ser abatida; apliquemos el lenguaje acerca de la caída de Baal a los reinos de este mundo que conocemos y en medio del cual vivimos". Otro ejemplo semejante se halla en Isaías 47:1 -"Desciende y siéntate en el polvo, virgen hija de Babilonia. Siéntate en la tierra, sin trono". Aquí casi está citando [aunque en la traducción] del poema "La Muerte de Baal" (13).

-- El poema de Ras Shamra acerca del rey Keret habla de cómo este ser celestial buscaba afanosamente una esposa con la cual pudiera tener hijos, a fin de que recibiera de él la herencia del mundo entero, y se lamentaba que sólo su siervo heredaría el mundo, y nos sus propios hijos (13).  El relato bíblico acerca de un lamento similar de Abraham, y de las promesas de que él efectivamente tendría una simiente que heredaría la tierra (Génesis 15:1-3, etc.) es muy similar. ¿A qué se deben estas similitudes? Para re-enfocar a Israel lejos de los mitos paganos que conocieron y dirigirlos hacia alguien histórico, real y literal en la persona de Abraham.

-- El relato babilónico de la Creación declara (Tablilla 4, línea 137) que Marduk partió en dos a Tiamat, la diosa del océano con su espada. La idea bíblica en que Yahvéh divide las aguas recoge claramente esta idea (Habacuc 3:9; Salmos 74:15; 78:13, 15; Éxodo 14:16, 21; Jueces 15:19; Isaías 35:6; 48:21; 63:12; Nehemías 9:11). Pero en gran medida estos pasajes se refieren al milagro que hizo Dios en el mar Rojo, estableciendo la creación de su pueblo al sacarlo de las aguas divididas del Mar. De nuevo, se reinterpreta la creación pagana con referencia a un acontecimiento histórico real en la experiencia del pueblo de Dios.

-- Había muchos mitos paganos relacionados con el fratricidio: el asesinato de un hombre perpetrado por su hermano. Israel en Egipto se habría encontrado con la leyenda egipcia en la que Set asesinó a Osiris; y al entrar a Canaán probablemente debieron oír la historia cananea acerca de Mot que mató a Baal. En Génesis 4 Moisés dio a Israel la verdadera historia del fratricidio, o sea, que Caín había asesinado a su hermano Abel. Los mitos paganos fueron re-enfocados en una situación histórica real que había ocurrido, de la cual cada lector debía sacar una advertencia personal respecto al peligro de la envidia y de un inaceptable acercamiento a Dios.

-- La explicación cananea acerca de la familia de los dioses consistía en que contenía un total de 70 dioses --la Tablilla ugarítica II AB 6.46 habla de los "setenta hijos de Asherah". Esto está re-enfocado por el relato de Génesis 10, donde se habla de 70 naciones de hombres. Asimismo, Génesis 46:27 y Éxodo 1:5 hablan de los 70 hijos de Jacob; y Deuteronomio 32:8 dice que el número de las naciones gentiles se fijó "según el número de los hijos de Israel" o, "Dios" (según algunos textos). Por lo tanto, la creencia en los 70 dioses del panteón cananeo se ha re-enfocado a la tierra acá abajo, donde había 70 hijos de Jacob, 70 naciones en el mundo que rodeaba a Israel, y Deuteronomio 32:8 podría implicar que cada uno recibe el cuidado de un ángel guardián del cielo.

-- Los héroes de los primitivos mitos paganos eran cazadores que cazaban terribles animales y enormes monstruos, por Ej., las relatadas en las hazañas de Gilgamés y su amigo Enkidu. Génesis 10:9 dice que Dios sólo menciona a un poderoso cazador llamado Nimrod ("Este fue vigoroso cazador delante de Jehová"), y en el relato de Dios él no era héroe.

-- Los anales mesopotámicos también presentan relatos tal como lo hace Génesis. Pero afirman que todo líder de la tierra bajó del cielo, y que los reyes eran efectivamente divinos. Génesis no hace mención alguna de esto; hay una clara demarcación entre cielo y tierra, y la gente no baja del cielo para convertirse en reyes en la tierra. Las genealogías de Génesis 11 son muy claras de que éstas son de hombres comunes y mortales. No obstante, tanto los anales de Génesis como las tradiciones mesopotámicas tienden a usar los números seis y siete, o múltiplos de ellos, al declarar cuántos años vivieron los hombres, o en los números de personas que se consignan en las genealogías (15). Moisés hizo esto a fin de mostrar que él estaba aludiendo conscientemente a esas tradiciones circunvecinas; y sin embargo re-enfocando el entendimiento de Israel de las realidades literales, humanas y terrenales hacia la exclusión de mitos y leyendas.

Corrección en Cautividad

 

Hay significativa evidencia de que, bajo inspiración, los escribas de Babilonia revisaron el libro de Deuteronomio y algunos de los libros históricos dejándolos en el formato actual (16). Esta así llamada historia deuteronómica intentaba hablar específicamente a las necesidades y debilidades de Judá que se hallaba en cautividad en Babilonia. En nuestro contexto actual es interesante notar la aparición frecuente del término "hijo / hijos de Belial" para describir a personas malignas. Los escritos judíos apóstatas hablan de un personaje llamado Beliar, una clase de Satanás personal. Sin embargo, el uso que hace la Biblia hebrea del término Belial --note la leve diferencia--es significativa. Porque según el léxico hebreo de Strong, "Belial" significa esencialmente "nada" o "fracaso". Por lo tanto, hijos de la nada, vacíos, insustancial. Conectándolo con la insistencia de Pablo en el Nuevo Testamento  de que los ídolos / demonios, de hecho, no son nada; no son dioses. Según  los escritos apócrifos judaicos, Beliar es activo en apartar a Israel de la obediencia a la Tora. Pero la Biblia hebrea no dice nada acerca de esto; más bien recalca que Israel mismo es culpable por su desobediencia y debe asumir plena y total responsabilidad por esto. Muchos de los escritos de Qumran menciona cómo Belial puede influir en el centro moral de un ser humano a fin de que ellos maquinen maldad (véase 1QH-a 2[10].16, 22; 4[12].12–13; 4[12].12; 6[14].21–22; 7[15].3;
10[2].16–17; 14[6].21). Sin embargo, esto es totalmente lo opuesto a lo que la Biblia hebrea (así como el Nuevo testamento) enfatiza, es decir, que el corazón humano mismo es la fuente de las tentaciones, y que por lo tanto los seres humanos son totalmente responsables de sus propios pecados.

Se podría presentar el argumento de que el relato total acerca del rechazo de Israel para entrar en la tierra de Canaán está formulado para aducir una razón para esto, ya que ellos tomaron la creencia de que la tierra estaba habitada por un dragón maligno que los consumiría allí. Esto es una calumnia para la buena tierra, y el argumento en general era que si ellos creían en el poder de Dios, entonces cualquier 'adversario' que hubiera en la tierra, del aspecto que fuera, al final no tenía poder real alguno (Números 13:32; 14:36; Deuteronomio 1:25). No obstante, no era el propósito de Dios decirle específicamente al pueblo que no había ningún dragón acechando en la tierra de Canaán; en cambio, él actuó con ellos de conformidad con sus temores, haciendo que la tierra literalmente se abriera y se tragara a los apóstatas que había entre ellos (Números 16:30), haciendo hincapié en que al hacer esto, él estaba haciendo "algo nuevo", algo que nunca se había hecho antes; porque no había dragón acechando en ninguna tierra capaz de tragar gente. Y por conducto de los profetas se ha recalcado que fue Dios y no algún dragón el que tragó a la gente. "El Señor [y no algún dragón] llegó a ser como enemigo, destruyó ["se ha tragado" - Versión del Rey Santiago) a Israel" (Lamentaciones 2:5 - y frecuentemente otros profetas). El pueblo de Israel que salió de Egipto fue incapaz de  heredar Canaán porque creía que era una tierra que se tragaba a sus habitantes (Número 13:32), y relacionaban esto con la presencia de gigantes en la tierra (Números 13:33). Tal como Josué y Caleb intentaban razonar con ellos, era necesario que ellos creyeran que a pesar de cualquier mito que hubiera a su alrededor, Dios era más poderoso que cualquier bestia mítica que hubiera allí. Y como no quisieron creer eso, fueron incapaces de entrar en la tierra, la que figuradamente simbolizaba a aquellos que son incapaces de alcanzar esa gran salvación que Dios ha preparado.

La declaración de Isaías de que Yahvéh crea tanto el bien como el mal (desastre), la luz y la oscuridad, no sólo tiene por objeto criticar el punto de vista dualístico de los babilonios acerca del cosmos; también tiene que ver con las falsas ideas que se estaban desarrollando entre los judíos en Babilonia, las cuales finalmente incorporan la falsa idea acerca de Satanás, las que después adoptó la mayor parte de la cristiandad. Según el escrito apócrifo judío, Las Visiones de Amran, los seres humanos eligen vivir bajo el control de uno de los dos ángeles. Amran tiene una visión de los dos ángeles antagónicos a los que se les ha dado control sobre la humanidad (4Q547 frgs. 1-2, col. 2.10-14 [Visiones de Amran-b] = 4Q547 frgs. 1-2, col. 3.9-13). El ángel del bien supuestamente tiene poder "sobre toda la luz", en tanto que el ángel del mal tiene autoridad "sobre toda la oscuridad". De este modo, la idea del dualismo --que es tan atractiva para todas las personas-- se hallaba en pleno vigor entre los judíos; y así Isaías 45:5-7 estaba también dirigido a la creciente creencia judía en Babilonia acerca de un cosmos dualista.

Notas:

(1) Paul Carus, The History of the Devil and the Idea of Evil (New York:Gramercy Books, 1996) p. 58.
(2) He ejemplificado esto detalladamente en  Bible Lives, capítulo 11.
(3) J.B. Russell, The Devil (Ithaca: Cornell University Press, 1977) p. 174.
(4) H.C. Kee, Medicine, Miracle and Magic (Cambridge: C.U.P., 1986) p. 70.
(5) Geza Vermes, Jesus the Jew (London: S.C.M., 1993) p. 61.
(6) E. Urbach, The Sages: Their Concepts and Beliefs (Jerusalem: Magnes Press, 1975) Vol. 1 pp. 471–483.
(7) Alfred Edersheim, The Life and Times of Jesus the Messiah Vol. 2 (London: Longmans, 1899) Apéndices 13 y 16.
(8) Kersey Graves documenta éstos y muchos otros ejemplos tomados del mundo entero en The Biography of Satan (Chicago: Frontline Books, 2000) pp. 63–66.
(9) Helene Celmina, Women in Soviet Prisons (New York: Paragon House, 1985) p. 133. Es una traducción del original letón  Sievietes PSRS Cietumos (Stockholm: Latvian National Fund, 1980).
(10) Martin Luther King, Strength to Love (Philadelphia: Fortress Press, 1981) p. 73.
(11) Según se cita en Umberto Cassuto, Biblical and Oriental Studies (Jerusalem: Magnes Press, 1975) Vol. 2 p. 98.
(12) Cassuto, ibid., p. 134.
(13) Cassuto, ibid. pp. 156, 164.
(14) Traducció al inglés de Cassuto, ibid. pp. 206–208.
(15) Demonstrado detalladamente por  Umberto Cassuto, A Commentary on the Book of Genesis (Jerusalem: Magnes Press, 1992) Vol. 2 pp. 255–259.
(16) Las similitudes de estilo, lenguaje e indicaciones de redacción común se explican en etalle en Martin Noth, The Deuteronomistic History (Sheffield: JSOT Press, 1981); hay un buen resumen en Terrence Fretheim, Deuteronomic History (Nashville: Abingdon Press, 1989). Véase también M. Weinfeld, Deuteronomy and the Deuteronomic School (Oxford: Clarendon
Press, 1972).

 

 

 


 
 
'EL VERDADERO DIABLO'