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EL VERDADERO DIABLO Una Exploración Bíblica |
correo electrónico del autor, Duncan Heaster
Contenido Capítulo 2 - Algunas Enseñanzas Básicas de la Biblia Capítulo 3 - Algunas Implicaciones Prácticas 3-1 Algunas Implicaciones Prácticas Capítulo 4 - Demonios Capítulo 5 - Un Examen de los Pasajes Específicos de la Biblia que Mencionan al Diablo y a Satanás Capítulo 6 - Algunas Conclusiones |
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5-19 Entregado a Satanás 1 Corintios 5:5: "... el tal sea entregado a Satanás para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús". Interpretación Popular Se sostiene que cuando un creyente cae de la gracia, él es tomado de nuevo por Satanás. Comentarios 1. El propósito de esta entrega era para que "el espíritu sea salvo". Si Satanás está resuelto a hacer que la gente peque y quede separada de Dios, ¿por qué lo que él les hace a la gente debería resultar en que ellos sean salvos? Es por la experiencias de la vida que Dios controla, que nos desarrollamos espiritualmente (Hebreos 12:5-11). 2. ¿Cómo pudo la iglesia de Corinto entregar al hermano rebelde a Satanás si nadie sabe dónde encontrarlo? 3. "Destrucción" también puede implicar "castigo" (por ej., 2 Tesalonicenses 1:9). ¿Acaso hemos de pensar que Dios trabajaría en cooperación con un ángel que se rebela en contra de él? 4. Note que a Satanás no se le describe entrando ávidamente en el hombre, cómo habríamos de esperar si Satanás está tratando constantemente de influir en todos los hombres para que pequen y apartar a los creyentes de Dios. Se le dice a la iglesia (v. 4) que entregue al hombre a Satanás. Explicaciones Sugeridas 1. Uno de los grandes "Satanases" --adversarios-- de la iglesia primitiva fue la autoridad romana de aquel tiempo, la cual, a medida que avanzaba el primer siglo, -- Puede que alguien te "entregue al juez" (Mateo 5:25). -- "Os entregarán a los concilios" (Mateo 10:17). -- Los judíos "entregarán [a Jesús] a los gentiles" (Mateo 20:19). -- "Los judíos… entregarán [a Pablo] en manos de los gentiles" (Hechos 21:11). -- "He sido entregado preso" (Hechos 28:17). Así que, ¿está Pablo aconsejándoles que entreguen al hermano pecador a las autoridades romanas para que lo castiguen? El pecado que él había cometido era incesto, y esto estaba penado bajo la ley romana. Recuerde que "destrucción" también significa "castigo". Leander Keck demuestra que la acción del hombre incestuoso era "contrario tanto a la ley judía como a la romana", quedando sujeto a castigo de parte de aquellas autoridades (1). 2. El término "Satanás" puede referirse aquí simplemente a los malos deseos del hombre. Él había cedido a ellos al cometer el pecado de incesto, y Pablo está quizás sugiriendo que si la iglesia se separa del hombre y lo deja que viva por un tiempo una vida carnal, tal vez finalmente terminará arrepintiéndose de modo que al final su espíritu será salvo en el juicio final. Esto es exactamente lo que ocurrió con el hijo pródigo (Lucas 15); al llevar una vida alejado de su familia espiritual y siguiendo totalmente a Satanás --sus malos deseos-- el resultado fue que finalmente se arrepintió. Jeremías 2:19 añade esto: "Tu maldad te castigará, y tu rebeldía te condenará; reconoce, pues, y ve cuán malo y amargo es" [lo que ellos habían hecho]". 3. La expresión "la carne" no significa necesariamente "el cuerpo". También puede referirse a una forma de vida controlada por nuestros malos deseos, es decir, Satanás. Los creyentes "no viven según la carne, sino según el Espíritu" (Romanos 8:9). Esto no significa que ellos sean sin su cuerpo físico, sino que no llevan una vida carnal. Antes de la conversión, "estábamos en la carne" (Romanos 7:5). Gálatas 5:19 menciona la perversión sexual, de la cual los ofensores de Corinto eran culpables, como una obra de la carne. 1 Juan 3:5 (compare v. 8) define a los pecados como "las obras del Diablo", equiparando así a la carne con el Diablo. De este modo, 1 Corintios 5:5 se podría entender como: "Que esa persona sea entregada a Satanás para destrucción de Satanás / el Diablo", con lo cual tenemos a Satanás destruyendo a Satanás. Es imposible entender esto si nos aferramos a la creencia popular referente a Satanás. Pero si se entiende que el primer Satanás es la autoridad romana y el segundo es la carne, o las expresiones pecaminosas de nuestros malos deseos, entonces no hay problema. 4. Hemos visto en nuestras notas sobre Lucas 10:18 que Satanás se usa a veces en el contexto de recordarnos que la enfermedad física es finalmente el resultado de nuestro pecado. Puede ser que el espíritu --conferido a los apóstoles en el primer siglo, tenía el poder de afligir a los creyentes pecadores con alguna enfermedad física o con la muerte-- por ej., Pedro pudo ordenar la muerte de Ananías y Safira (Hechos 5); algunos en Corinto eran físicamente "enfermos y debilitados" como castigo por abusar del servicio de la comunión (1 Corintios 11:30); Jesús pudo amenazar a los falsos maestros que había en la iglesia de Tiatira con muerte instantánea a menos que se arrepintieran (Apocalipsis 2:22-23), y Santiago 5:14-16 implica que la grave enfermedad de algunos miembros de la iglesia se debía a sus pecados, y les sería quitada si mostraban arrepentimiento. Si la enfermedad que aquí se menciona era una enfermedad común, no se deduce que si un cristiano se arrepiente del pecado él quedará sano automáticamente, por ej., Job fue afligido por una enfermedad como una prueba de parte de Dios, no porque él hubiera pecado. Fue para la ayuda y sanidad de los creyentes arrepentidos, los cuales habían sido afligidos de esta manera, que probablemente se usaba principalmente el "don de sanidad" en la iglesia primitiva (1 Corintios 12:9). De este modo, cuando Pablo entregó al hermano incestuoso a Satanás, y también entregó a "Himeneo y Alejandro... a Satanás para que aprendan a no blasfemar" (1 Timoteo 1:20), puede que él los haya herido con una enfermedad física debido a que siguieron a Satanás, o sea, sus malos deseos. Algún tiempo después Pablo consignó que Alejandro todavía "en gran manera se ha opuesto a nuestras palabras" (2 Timoteo 4:14, 15). La amplitud de su oposición a la prédica de Pablo se hace evidente si entendemos que Alejandro había sido afligido por Pablo con una enfermedad antes de que escribiera la primera carta a Timoteo, pero aún rehusaba aprender su lección en los días en que Pablo escribió otra vez a Timoteo. De nuevo, note que Satanás trataría de enseñar a Alejandro a "no blasfemar" (1 Timoteo 1:20). Si Satanás es una persona maligna, mentirosa y blasfema respecto a la palabra de Dios, ¿cómo puede él enseñar a un hombre a no blasfemar contra Dios? 5. El mismo verbo para decir "entregar" ocurre en la Septuaginta en Job 2:6, donde Dios "entrega" a Job a Satanás, con el siguiente comentario (en la Septuaginta): "Tú has de proteger su psyche, su espíritu". La conexión entre los pasajes me sugeriría que Job estaba en necesidad de un mejoramiento espiritual, aun cuando se le consideraba justo (Job 1:1). Sea como fuere, el mensaje seguramente es que Dios entregó una persona a un adversario, para la salvación espiritual de esa persona. La idea tradicional acerca de un conflicto entre Dios y Satanás no encaja aquí. Bíblicamente, a Dios se le representa en control de cualquier "Satanás" / adversario, y usar a "Satanás" a su voluntad para el mejoramiento espiritual del pueblo, más bien que para su destrucción. La historia de Job es un ejemplo clásico. ¿Hemos de entender realmente que hay un ser personal llamado Satanás que es desobediente a Dios, que no está bajo su control, y empeñado en conducir a la gente a su destrucción espiritual? De ninguna manera. 1 Corintios 5:5 y el relato de Job enseñan totalmente lo contrario. Y, por supuesto, muy pertinente aquí, 2 Timoteo 2:26, donde se habla de personas que quedan atrapadas en la trampa del Diablo a voluntad / deseo de Dios (2). Notas (1) Leander Keck, Paul and His Letters (Philadelphia: Fortress, 1988) p. 106. (2) Esta es la traducción ofrecida por H.A. Kelly, en Satan: A Biography (Cambridge: C.U.P., 2006) p. 119.
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